dimarts, 29 de gener del 2008

HADES PLUTÓN



Hades: Dios de los muertos que custodia las almas de los muertos.

Alias: Plutón
Padres de Hades:
Crono y Rea
Atributos:


Hades es a menudo representado sosteniendo un cuerno de abundancia, símbolo de la riqueza. Aparece pocas veces solo, normalmente al lado de su mujer y con el cetro. Se le representa con barba, cabellos ásperos, igual que Poseidón y Zeus. También es habitual que en sus representaciones aparezca un gallo, animal que se sacrificaba para las divinidades.
Culto:


Hades es el dios de los muertos. En la religión oficial griega todas las almas se dirigen en el Hades, aunque también habían diversas sectas que prometían otra salvación (rituales órficos, dionisíacos,...).
Perséfone:

La consorte de Hades, y reina arcaica del inframundo por derecho propio, antes de que los olímpicos helénicos se estableciesen, era Perséfone, presentada por los griegos como hija de Zeus y Deméter. Perséfone no se sometió a Hades voluntariamente, sino que fue raptada por éste mientras cogía flores con sus amigas. Hades amaba a Perséfone tan profundamente que no le permitió salir del inframundo. Su madre la echaba tanto de menos que lanzó una maldición a la tierra, produciendo una gran hambruna. Hades engañó a Perséfone para que comiese seis (o cuatro, según las versiones) semillas de granada, lo que hizo que no pudiese abandonar el inframundo ni con la ayuda de Zeus. Perséfone supo de la depresión de su madre y pidió a Hades que le dejase volver a la tierra de los vivos, con la condición de que pasaría con él un mes por cada semilla que había comido. Cada año Hades volvía con Perséfone en su carro al inframundo. La hambruna (el invierno) ocurría en los meses en los que Perséfone estaba con Hades, al retirar Deméter sus dones del mundo. En la primavera, cuando Perséfone se volvía a reunir con ella, Deméter hacía que las cosas crecieran de nuevo.

Tino


Perseo

Perseo es un
semidiós de la mitología griega, hijo de Dánae y Zeus.


Nacimiento
Dánae había sido encerrada por su padre,
Acrisio, en una torre, para impedir que tuviera trato con varón, ya que una profecía le había anunciado que moriría a manos de su nieto. Sin embargo, Zeus se metamorfoseó en lluvia de oro y consiguió acceder a la estancia de Dánae y dejarla encinta.


Expedición para matar a Medusa
La belleza de Dánae hizo que Polidectes cayera enamorado de ella. Pensando que el joven Perseo podía ser un estorbo en sus planes intentó librarse de él mediante una estratagema. Ésta consistía en hacer creer a todo el mundo que pretendía conquistar a la princesa
Hipodamía. Polidectes pidió a los habitantes de la isla que le entregasen un caballo cada uno como presente para poder ofrecer como regalo a la princesa. Al no tener ningún caballo que ofrecerle, Perseo le prometió traerle la cabeza de Medusa, una de las tres Gorgonas que podía convertir en piedra a los hombres sólo con su mirada. Polidectes aceptó satisfecho el ofrecimiento, pensando que la misión era un suicidio y el joven nunca regresaría.
Sin embargo, Zeus decidió ayudar a su hijo por lo que pidió a los dioses
Atenea y Hermes que le prestaran su ayuda. Hermes le dio una espada con la que poder cortar la cabeza de Medusa mientras que Atenea le regaló un brillante escudo y le aconsejó sobre las tareas que tendría que realizar. Con el fin de encontrar el escondite de Medusa, Perseo fue en busca de las Grayas, tres ancianas que sólo tenían un mismo ojo y un mismo diente y que compartían pasándoselos una a la otra. Perseo les arrebató el ojo y el diente, obligándolas a confesar donde estaba situada la residencia de Medusa a cambio de devolvérselos.
En su camino, Perseo se encontró con las
Náyades, de las que consiguió un zurrón mágico, el casco de Hades, que permitía volver invisible al que lo llevara puesto, y unas sandalias aladas. Con la ayuda de estos objetos logró introducirse en la residencia de las gorgonas. Usando el escudo como espejo logró cortar la cabeza de Medusa sin tener que mirarla. De la sangre de Medusa nació el caballo alado Pegaso.

Rescate de Andrómeda

De vuelta a su hogar, Perseo encontró a Andrómeda encadenada a una roca, lugar donde había sido dejada por sus padres Cefeo y Casiopea para ser devorada por el monstruo marino Ceto. Perseo se enamoró de Andrómeda por lo que la liberó y mató al monstruo con su espada o, según otras versiones, petrificando una parte del monstruo al mostrarle la cabeza de Medusa. Se quiere casar con Andrómeda, pero la joven ya tenía otro pretendiente, llamado Fineo, al que no le gustó que su novia se emparejara con otro; entonces Perseo no tiene más remedio que convertir en piedra a él y a los que lo acompañan. Perseo y Andrómeda lograron finalmente casarse (después llegaron a tener seis hijos: Perses, Alceo, Heleo, Méstor, Esténelo y Electrión, y una hija llamada Gorgófone).


Cumplimiento de la profecía
Perseo devuelve todos los objetos mágicos y le regala a Atenea la cabeza de Medusa, que desde ese momento ella incorpora a su escudo. Después decide regresar a
Argos.
Acrisio se entera de que su nieto viaja para encontrarse con él y pone tierra de por medio. Cuando Perseo llega, no lo encuentra. Está en un reino vecino,
Larisa, presenciando unos juegos. Perseo lo sigue. Una vez allí, los organizadores le proponen participar en los juegos. Perseo accede a participar en lanzamiento de disco. Cuando lo tira, lo hace con tan mala fortuna que golpea a Acrisio en el centro del pecho y lo mata, cumpliéndose así la profecía.

Carlos




Ares: El dios de la guerra por excelencia.

Alias: Marte
Padres de Ares:
Zeus y Hera
Descendencia de Ares
Con
Afrodita:
Deimo
Eros
Fobo
Harmonía
Atributos:



Se representa con coraza y casco, y armado de escudo, lanza y espada. Su talla es sobrehumana y profiere gritos terribles. Generalmente se le representa combatiendo a pie, pero también se ve sobre un carro tirado por cuatro corceles. Los animales consagrados son el perro y el buitre, y suelen estar presentes en las representaciones del dios.
Culto:



En la propia Grecia, era objeto de un culto particular en Tebas, donde se lo consideraba antepasado de los descendientes de Cadmo. Allí poseía un manantial, guardado por un dragón que era hijo suyo. Cuando Cadmo quiso coger agua, a fin de realizar un sacrificio, el dragón trató de impedírselo. Cadmo lo mató, pero luego hubo de expiar ese delito sirviendo a Ares durante ocho años en calidad de esclavo.
Leyenda:




Ares (Marte, en latín), era hijo de Zeus y Hera y, por eso, pertenece a la segunda generación de los Olímpicos, a diferencia de sus hermanas Hebe e Ilitía, que son divinidades secundarias. Desde la época homérica, Ares aparece como el espíritu de la batalla, que goza en matanza y sangre. En el caso de la guerra de Troya, combatió casi siempre a favor de los troyanos. Sin embargo, como que le importa poco la justicia de la causa que defiende, a veces ayuda a los aqueos. Armado de pies a cabezas, generalmente lo acompañan demonios, que le sirven de escuderos, en particular Deimo y Fobo (el Temor y el Terror), que son hijos suyos, y también a Éride (la discordia) y Enio. Según las fuentes, Ares habitaría en Tracia, un país semisalvaje de clima rudo, rico en caballos y recorrido por poblaciones guerreras. Según cierta tradición, el pueblo de las amazonas, hijas de Ares, también moran allí.La mayoría de los mitos en que interviene Ares son narraciones de combates, pero no siempre el dios sale vencedor. Parece como si los griegos, desde la época de Homero, se hayan complacido en mostrar la fuerza bruta de Ares contenida o burlada por la más inteligente de Heracles o por la viril prudencia de Atenea. Por ejemplo, en la batalla de Troya, Ares combatía al lado de Héctor, que se encontró frente a frente con Diomedes. Actuó en seguida, pero Atenea interviene y se las compone de modo que desvía la lanza del dios, el cual es herido por Diomedes. Después de un alarido espantoso que oye todo el ejército, el dios huye al Olimpo para que le cure Zeus. Otro infortunio de Ares es su encarcelamiento por los Alóadas, que lo tuvieron, durante trece meses, encadenado y encerrado en una vasija de bronce.Aparte de las historias de combate, la leyenda atribuye a Ares muchas aventuras amorosas. La más célebre, sin duda, es la que nos lo presenta unido clandestinamente con Afrodita, aunque tuvo muchos hijos con mujeres mortales. La mayoría de ellos fueron hombres violentos, inhospitalarios, que agredían a los caminantes, los mataban o se entregaban a actos de crueldad.


Tino

Hebe


En la mitología griega, Hebe (en griego antiguo Ἥβη)era la personificación de la juventud, descrita como hija de Zeus y Hera. Según La Ilíada, Hebe era la ayudante de los dioses: llenaba sus copas con néctar, ayuda a Hera a enganchar los caballos a su carro y bañaba y vestía a su hermano Ares. Según La Odisea, se casó con Heracles tras la apoteosis de éste, siendo sustituida en sus labores por el joven príncipe troyano Ganimedes. Sin embargo, tradiciones posteriores contaban que había sido madre con él de dos hijos, Alexiares y Aniceto, y que era una divinidad con el poder de rejuvenecer a los ancianos, como hizo en una ocasión con Yolao por un día cuando éste iba a luchar con Euristeo.
En el arte solía ser representada llevando un vestido sin mangas.
Su equivalente en la mitología romana era Juventas, siendo tradición que los muchachos le ofrecieran una moneda cuando vestían por primera vez la toga de los adultos. Fue adorada desde época muy temprana, pues su capilla en el Capitolio existía antes de que se construyese el tempo de Júpiter. Otro templo de Juventas, situado en el Circo Máximo, fue jurado por el cónsul Marco Livio tras la derrota de Asdrúbal, en el 207 adC, y consagrado 16 años después.

Paz Bernet 2n. A

PSIQUE

Según la leyenda, Psique era la menor de tres hermanas hijas de un rey de Anatolia y la más hermosa de ellas. Afrodita, celosa de su belleza, envió a su hijo Eros (Cupido) para que le lanzara una flecha de oro oxidado, que la haría enamorarse del hombre más horrible y ruin que encontrase. Sin embargo, Eros se enamoró de ella y lanzó la flecha al mar; cuando Psique se durmió, se la llevó volando hasta su palacio.
Para evitar la ira de su madre, una vez que tiene a Psique en su palacio, Eros se presenta siempre de noche, en la oscuridad, y prohíbe a Psique cualquier indagación sobre su identidad. Cada noche, en la oscuridad, se amaban. Una noche, Psique le contó a su amado que echaba de menos a sus hermanas y quería verlas. Eros aceptó, pero también le advirtió que sus hermanas querrán acabar con su dicha. A la mañana siguiente, Psique estuvo con sus hermanas que le preguntaron, envidiosas, quién era su maravilloso marido. Psique, al no poder explicarles como era su marido puesto que no le había visto, titubeó y les contó que era un joven que estaba de caza, pero acabó confesando la verdad, que realmente no sabía quién era. Así, las hermanas de Psique, la convencieron para que en mitad de la noche encienda una lámpara y observe a su amado, pues seguro que sólo sería un monstruo y por eso desear ocultar su verdadera apariencia. Psique les hace caso. Una gota de aceite hirviendo cayó sobre la cara de Eros dormido, que despertó y abandona decepcionado a su amante.
Cuando Psique se da cuenta de lo que ha hecho, ruega a Afrodita que le devuelva el amor de Eros, pero la diosa, rencorosa, le ordena realizar cuatro tareas, casi imposibles para un mortal, antes de recuperar a su amante divino. Como cuarto trabajo, Afrodita exige a Psique que vaya a buscar un cofre al
Hades. Cuando consigue llegar allí, Perséfone, diosa de la ultratumba, le dice que lo que hay en el cofre es sólo para Afrodita. Psique, tentada por el poder que podría darle lo que había en ese cofre, olvida que la curiosidad ya había arruinado una vez su vida, y lo abre, pero en vez de encontrar poder, encuentra sueño eterno. Psique cae en la hierba dormida para toda la eternidad, pero Eros, apiadado, la rescata y soluciona las cosas. Tiempo después, Afrodita y Psique hacen las paces, y permanecen junto con Eros en el Olimpo.

Atenea / Minerva

NOMBRE GRIEGO: Atenea
NOMBRE ROMANO: Minerva.
DIOSA DE: La Razón.
PARENTESCO: Zeus y Metis.
ATRIBUTOS: Se la representa con la armadura hoplítica, es decir, con la lanza, el casco y la égida (especie de coraza de piel de cabra). En la égida hay representada la cabeza de la gorgona Medusa, que le había dado Perseo. Su animal favorito es la lechuza; su planta, el olivo. Alta, de rasgos serenos, más majestuosa que bella, Atenea se la describe tradicionalmente como la "diosa de ojos garzos".
LEYENDA: Atenea (Minerva, en latín) es hija de Zeus y de Metis. Ésta se hallaba encinta y a punto de dar a luz una hija, cuando Zeus se la tragó. Lo hizo por consejo de Urano y de Gea, que le revelaron que si Metis daba a luz una hija, a continuación tendría un hijo que arrebataría a Zeus el imperio del cielo. Por esa razón, cuando llegó el momento del parto, el padre ordenó a Hefesto que le partiese la cabeza con un hachazo. De la cabeza salió Atenea, completamente armada, que profirió un grito de guerra que resonó en cielo y tierra. El lugar donde nació se sitúa generalmente al borde del lago Tritonis, en Libia.

Había dedicado su talento a las artes de la paz, y en Ática se le reconocían, entre otras más, la invención del aceite de oliva, además de la introducción del olivo en el país, como regalo que había hecho en el Ática para merecer que su pueblo la reconociese como soberana. No obstante, antes de ello se disputó con Posidón para la sobiranía, y cada uno trató de ofrecer al país el mejor regalo para acrecentar sus méritos. Posidón hizo surgir, de un golpe de tridente, un lago salado en la Acrópolis de Atenas; Atenea hizo que brotase allí un olivo. Los doce dioses, que desempeñaron de árbitros, confirieron la victoria a Atenea, y con ella la sobiranía sobre el Ática.

dilluns, 28 de gener del 2008

ARTEMIS DIANA


Diana / Artemis
En la mitología romana, Diana era la diosa virgen de la caza y protectora de la naturaleza. Su diosa griega equivalente en la literatura es Artemisa, si bien en cuanto a culto era de origen itálico.
Funciones
Diana fue originalmente una diosa de la caza, relacionada con los animales y las tierras salvajes. Más tarde pasó a ser una diosa de la luna, suplantando a Luna y siendo también un emblema de la castidad. Los robledos le estaban especialmente consagrados. Era loada en la poesía por su fuerza, gracia atlética, belleza y habilidades en la caza.
Mito
Nacida poco antes que su hermano gemelo Apolo en la isla de Ortigía (luego llamada Delos), Diana era hija de Júpiter y Latona. Siendo testigo de los dolores del parto de su madre, concibió tal aversión hacia el matrimonio que pidió y obtuvo de su padre la gracia de guardar perpetua virginidad, como su hermana Minerva. El propio Júpiter la armó con arco y flechas y la hizo reina de los bosques. Le dio para comitiva de hermosas ninfas que debían hacer votos de castidad. Con esta numerosa comitiva se dedicaba a la caza, su ocupación favorita.
Diana es grave, severa, cruel e incluso vengativa. Prevalece sin piedad contra todos los que ganan su resentimiento: no vacila en destruir sus cosechas, devastar sus manadas, sembrar epidemias a su alrededor, humillarles e incluso matar a sus hijos. Así, exigió el sacrificio de Ifigenia, aunque en el momento clave fue sustituida por un ciervo. A instancias de Latona se unió a Apolo para matar con su flechas a todos los hijos de la infeliz Níobe, que había presumido de su más numerosa prole. Trata a sus ninfas con el mismo rigor, si olvidan su deber: transformó a Calisto en osa y la expulsó de su cortejo por quedar embarazada.
También fue la perdición del pastor Acteón, que la vio bañándose desnuda junto a sus ninfas, por lo que Diana lo transformó en venado e hizo que sus propios perros de caza le devorasen. Otro día, en un acceso de celos, taladró con sus flechas o hizo fallecer cruelmente a Orión.
Se enamoró, aunque sólo platónicamente, del pastor Endimión, a quien besaba cuando dormía tan suave que no se despertaba. Este nieto de Júpiter había logrado del amo del Olimpo el singular favor del sueño eterno. Siempre joven, sin envejecer ni morir, dormía en una gruta del monte Latmos, en Caria.
Culto
Diana de los bosques fue pronto completamente helenizada. [5]Diana fue considerada con gran reverencia por los ciudadanos de clase inferior y los esclavos, pudiendo éstos recibir asilo en sus templos

Jasón

Jasón es un héroe mitológico griego. Era hijo de Esón y de Alcímeda, rey de Yolcos, quien fue destronado por su hermano Pelias. Éste fue advertido por el oráculo de que tuviera cuidado con un hombre calzado con una sola sandalia porque pondría en peligro su trono.
Jasón fue educado por el
centauro Quirón hasta que fue adulto. Cuando Jasón cumplió los veinte años, se dirigió a Yolcos dispuesto a recuperar el trono que por herencia le pertenecía. En el camino, tuvo que cruzar un río donde perdió una de sus sandalias. Al llegar a la ciudad, fue llamado por su tío Pelias y éste, al darse cuenta de que aquél podía ser el hombre que anunciaba el oráculo, decidió alejarlo de su tierra enviándolo a una difícil misión: viajar hasta la Cólquida (al pie del Cáucaso), y traer de allí el vellocino de oro, que había sido la piel de un carnero fabuloso que había salvado la vida a Frixo, antepasado de Pelias, y lo había trasladado a la Cólquida. Allí Frixo ofreció en sacrificio a Zeus este carnero y luego regaló la piel del animal, que era de oro, al rey Eetes, que lo depositó en un árbol custodiado por dos toros que arrojaban fuego por la boca y una serpiente que nunca dormía.
Los Argonautas
Jasón, acompañado de un grupo de unos cincuenta héroes griegos (
Orfeo, Cástor, Pólux, Peleo, Hércules, Teseo, Laertes, Atalanta —única mujer de la expedición, famosa corredora y arquera—, Meleagro...) organizó la expedición. Le encargó a Argos, la construcción del navío que recibió el nombre de Argo en homenaje a su constructor. Y del nombre de la nave tomaron a su vez el de Argonautas (marineros de Argo) los héroes que en ella embarcaron. Reunidos pues los Argonautas, se hicieron a la mar en dirección a la Cólquida.
No mucho después llegaron a la isla de
Lemnos, donde sólo habitaban mujeres.. Los Argonautas permanecieron con ellas un tiempo y luego se marcharon.
Después de pasar por algunos países, llegaron a
Salmideso donde encontraron a Fineo, ciego y adivino, al que los Argonautas ayudaron a deshacerse de las Harpías, monstruos voladores con rostro de mujer, garras y alas, que, cumpliendo un castigo impuesto por los dioses, impedían que Fineo pudiera alimentarse.
Fineo, en agradecimiento, informó a los Argonautas sobre el camino a seguir hasta la Cólquida y además les dijo cómo podían superar el peligro que les esperaba al llegar a las Rocas Azules, dos enormes peñascos flotantes en continuo movimiento que chocaban entre sí aplastando a todos los que pretendían pasar entre ellas.
Superado este obstáculo, llegaron a la Cólquida. Jasón anunció a su rey, Eetes, su propósito. Éste le dijo que le dejaría llevarse el
vellocino de oro si antes conseguía uncir a los dos toros que lo custodiaban, arar un campo con ellos, arrojar sobre los surcos unos dientes que había entregado Atenea al rey y luego vencer a una serpiente que nunca dormía y que permanecía al pie del árbol donde se hallaba el vellocino. Medea, la hija del rey Eetes, que era hechicera, se enamoró apasionadamente de Jasón y ayudó a éste a llevar a buen término su hazaña (previo compromiso de Jasón de llevarla consigo a Yolcos), poniendo en práctica su brujería.
Dio a Jasón una pócima mágica para que no le hicieran daño los toros monstruosos. Habiendo conseguido uncir a los toros, lanzó los dientes sobre los surcos hechos en la tierra. De ellos brotaron cientos de hombres armados que se lanzaron contra el héroe, pero éste, siguiendo las instrucciones de Medea, arrojó una piedra entre ellos y los ejércitos se enfrentaron entre sí. Luego, Medea provocó un terrible sueño a la serpiente, Jasón se apoderó de la preciada piel y huyó con sus hombres, con Medea y con el hermano de ésta,
Apsirto, en su embarcación. Los hombres de Eetes persiguieron a la nave y Medea mató a su hermano, lo despedazó y lo arrojó al mar. El rey Eetes recogió los restos de su hijo y perdió de vista a los Argonautas.
Después de esto, los Argonautas emprendieron el regreso sorteando diversos peligros: tempestades, el asedio de las
Sirenas, el ataque de los monstruos Escila y Caribdis. Finalmente llegaron a Yolcos. Allí Pelias recibió de Jasón el vellocino y luego murió, a manos de sus propias hijas, debido a una artimaña de Medea. Entonces Jasón y Medea huyeron a Corinto. Tuvieron dos hijos. Pero más tarde Jasón repudió a su mujer para casarse con Glauca, hija del rey de Corinto. Medea, para vengarse, acabó con la vida de Glauca y con la de los hijos que había tenido con Jasón.

Poseidón


El dios que reina sobre el mar, pero su dominio se extiende con todo aquello que sea acuático: aguas corrientes y lagos. En cambio los ríos poseen sus propias divinidades.
Atributos:
Se representa armado con el tridente, que es el arma por excelencia de los pescadores de atún, y montado en un carro arrastrado por animales monstruosos, mitad caballos mitad serpientes. Este carro se halla rodeado de peces, delfines, animales marinos de toda clase, de nereidas, y genios diversos.
Culto:
Poseidón era señor de una isla maravillosa: la Atlántida. Era el protector de los navegantes: en un combate naval, era él quien decidía qué grupo humano debía ganar. También recibe el culto de muchos lugares eminentemente marineros, de la costa, sobre todo en Súnium, Ática.
Leyenda:
Poseidón (Neptuno, en latín) es uno de los Olímpicos, hijo de Crono y Rea. Según las tradiciones, a veces se le considera el hermano mayor de Zeus, pero en otras el menor. La leyenda más antigua, que cuenta que Zeus obliga a su padre Crono a devolver los hijos que se había tragado, supone que Zeus es el menor de la progenie, del mismo modo que Crono, que destronó a su padre siendo el menor de los hijos de éste; sin embargo, a medida que se fue desarrollando en Zeus el derecho de primogenitura y de soberanía, pasó a ser el mayor. Es por eso que en las leyendas de la época clásica Poseidón es considerado generalmente el más joven que su hermano.Poseidón no sólo tiene el dominio del mar, sino que también puede desatar tempestades, desquiciar las rocas de las costas con un golpe de su tridente, y hacer brotar manantiales. Desde los tiempos de la Ilíada, Poseidón tiene asignado este dominio, como Hades reina en los Infiernos, y Zeus en el Cielo y la Tierra. Sus relaciones con Zeus no son siempre amistosas. Con Hera y Atenea, tomó parte en la conjura divina que tenía por objeto encadenar a Zeus.Poseidón participó durante un año, junto con Apolo y el mortal Éaco, en la construcción de la muralla de Troya. No obstante, creó un monstruo que salía del fondo del mar y asolaba los pueblos troyanos para vengarse de Laomedonte, que le había negado el salario convenido. Aquí empezó el rencor de Posidón hacia Troya -por eso intervino en la guerra a favor de los aqueos
Pero las dos disputas más conocidas fueron motivadas por Atenas y
Argo. Posidón había puesto la mirada en Atenas y había sido el primero en tomar posesión de la ciudad haciendo brotar, con su tridente, un "mar" en la cima de la Acrópolis -se trataba de un pozo de agua salada, según Pausanias-. Pronto se presentó Atenea, que plantó un olivo y luego reivindicó la sobiranía del país. Ante la disputa, el tribunal falló a favor de Atenea porque había plantado la primera el olivo en la roca de la Acrópolis. Posidón montó en cólera e inundó la llanura de Eleusis. En lo que concierne a la ciudad de Argo, se decidió a favor de la diosa Hera, y Poseidón, preso de cólera, descargó su maldición sobre Argólide y secó todas sus fuentes. Gracias a Amimone, una de las Danaides, de quien se enamoró Posidón, la maldición quedó sin efecto, y la Argólida recuperó sus manantiales.Poseidón pasaba por haber tenido numerosos amores, todos ellos fecundos, como Zeus; pero mientras los hijos de Zeus eran héroes bienhechores, los de Posidón, como los de Ares, eran casi siempre gigantes maléficos y violentos: con Toosa engendró al cíclope Polifemo; con Medusa, al gigante Crisaor y al caballo alado Pegaso…Por otro lado, Posidón tiene una esposa "legítima", la diosa Anfitrite, una nereida, de la que no tuvo hijos.

dijous, 24 de gener del 2008

afrodita

Nombre griego: Afrodita
Nombre romano: Venus
Diosa : amor
Parentesco: Urano
Atributos: En el siglo VII aC suele aprarecer con corona y con suntuosos vestidos; pero desde el siglo IV ya se la representa desnuda o casi, con un amplio repertorio de posiciones.
Leyenda: El nacimiento de Afrodita (Venus, en latín) ha sido transmitido según dos versiones: ora es hija de Zeus y Dione (Afrodita Pandemo, la popular, según Plaón), ora hija de Urano (Afrodita Urania, diosa del amor puro), cuyos órganos sexuales, cortados por Crono, cayeron al mar y engendraron a la diosa. Apenas salida del mar, los Céfiros la llevaron primero a Citera y luego a la costa de Chipre, donde fue acogida por las Estaciones, vestida, ataviada y conducida por ellas a la morada de los Inmortales.

Jasón

Jasón es un héroe mitológico griego. Era hijo de Esón y de Alcímeda, rey de Yolcos, quien fue destronado por su hermano Pelias. Éste fue advertido por el oráculo de que tuviera cuidado con un hombre calzado con una sola sandalia porque pondría en peligro su trono.
Jasón fue educado por el centauro Quirón hasta que fue adulto. Cuando Jasón cumplió los veinte años, se dirigió a Yolcos dispuesto a recuperar el trono que por herencia le pertenecía. En el camino, tuvo que cruzar un río donde perdió una de sus sandalias. Al llegar a la ciudad, fue llamado por su tío Pelias y éste, al darse cuenta de que aquél podía ser el hombre que anunciaba el oráculo, decidió alejarlo de su tierra enviándolo a una difícil misión: viajar hasta la Cólquida (al pie del Cáucaso), y traer de allí el vellocino de oro, que había sido la piel de un carnero fabuloso que había salvado la vida a Frixo, antepasado de Pelias, y lo había trasladado a la Cólquida. Allí Frixo ofreció en sacrificio a Zeus este carnero y luego regaló la piel del animal, que era de oro, al rey Eetes, que lo depositó en un árbol custodiado por dos toros que arrojaban fuego por la boca y una serpiente que nunca dormía.
Los Argonautas
Jasón, acompañado de un grupo de unos cincuenta héroes griegos (Orfeo, Cástor, Pólux, Peleo, Hércules, Teseo, Laertes, Atalanta —única mujer de la expedición, famosa corredora y arquera—, Meleagro...) organizó la expedición. Le encargó a Argos, la construcción del navío que recibió el nombre de Argo en homenaje a su constructor. Y del nombre de la nave tomaron a su vez el de Argonautas (marineros de Argo) los héroes que en ella embarcaron. Reunidos pues los Argonautas, se hicieron a la mar en dirección a la Cólquida.
No mucho después llegaron a la isla de Lemnos, donde sólo habitaban mujeres.. Los Argonautas permanecieron con ellas un tiempo y luego se marcharon.
Después de pasar por algunos países, llegaron a Salmideso donde encontraron a Fineo, ciego y adivino, al que los Argonautas ayudaron a deshacerse de las Harpías, monstruos voladores con rostro de mujer, garras y alas, que, cumpliendo un castigo impuesto por los dioses, impedían que Fineo pudiera alimentarse.
Fineo, en agradecimiento, informó a los Argonautas sobre el camino a seguir hasta la Cólquida y además les dijo cómo podían superar el peligro que les esperaba al llegar a las Rocas Azules, dos enormes peñascos flotantes en continuo movimiento que chocaban entre sí aplastando a todos los que pretendían pasar entre ellas.
Superado este obstáculo, llegaron a la Cólquida. Jasón anunció a su rey, Eetes, su propósito. Éste le dijo que le dejaría llevarse el vellocino de oro si antes conseguía uncir a los dos toros que lo custodiaban, arar un campo con ellos, arrojar sobre los surcos unos dientes que había entregado Atenea al rey y luego vencer a una serpiente que nunca dormía y que permanecía al pie del árbol donde se hallaba el vellocino. Medea, la hija del rey Eetes, que era hechicera, se enamoró apasionadamente de Jasón y ayudó a éste a llevar a buen término su hazaña (previo compromiso de Jasón de llevarla consigo a Yolcos), poniendo en práctica su brujería.
Dio a Jasón una pócima mágica para que no le hicieran daño los toros monstruosos. Habiendo conseguido uncir a los toros, lanzó los dientes sobre los surcos hechos en la tierra. De ellos brotaron cientos de hombres armados que se lanzaron contra el héroe, pero éste, siguiendo las instrucciones de Medea, arrojó una piedra entre ellos y los ejércitos se enfrentaron entre sí. Luego, Medea provocó un terrible sueño a la serpiente, Jasón se apoderó de la preciada piel y huyó con sus hombres, con Medea y con el hermano de ésta, Apsirto, en su embarcación. Los hombres de Eetes persiguieron a la nave y Medea mató a su hermano, lo despedazó y lo arrojó al mar. El rey Eetes recogió los restos de su hijo y perdió de vista a los Argonautas.
Después de esto, los Argonautas emprendieron el regreso sorteando diversos peligros: tempestades, el asedio de las Sirenas, el ataque de los monstruos Escila y Caribdis. Finalmente llegaron a Yolcos. Allí Pelias recibió de Jasón el vellocino y luego murió, a manos de sus propias hijas, debido a una artimaña de Medea. Entonces Jasón y Medea huyeron a Corinto. Tuvieron dos hijos. Pero más tarde Jasón repudió a su mujer para casarse con Glauca, hija del rey de Corinto. Medea, para vengarse, acabó con la vida de Glauca y con la de los hijos que había tenido con Jasón.

RAQUEL

APOLO





Nombre griego/romano: Apolo.
Dios: del sol y la música
Parentesco: hijo de Zeus y Latona, hermano gemelo de Ártemis.
Atributos: arco, flecha, lira y sol
Mito de Apolo y Dafne: Apolo quiso matar a una Pitón que se escondía en el monte Parnaso. Habiéndola herido con sus flechas, la siguió, moribunda, en su huída hacía el templo de Delfos. Allí acabó con ella mediante varios disparos de sus flechas. Delfos era un lugar sagrado donde se pronunciaban los oráculos de la Madre Tierra. Hasta los dioses consultaban el oráculo y se sintieron ofendidos de que allí se hubiera cometido un asesinato. Querían que Apolo reparase de algún modo lo que había hecho, pero Apolo reclamó Delfos para sí. Se apoderó del oráculo y fundo unos juegos anuales que debían celebrarse en un gran anfiteatro, en la colina que había junto al templo. Orgulloso Apolo de la victoria conseguida sobre la serpiente Pitón, se atrevió a burlarse del dios Eros por llevar arco y flechas siendo tan niño. Irritado, Eros se vengó disparándole una flecha de oro, que le hizo enamorarse de la ninfa Dafne locamente, mientras a esta le disparó otra flecha, esta de plomo, que le hizo odiar el amor y especialmente el de Apolo. Dafne era una ninfa cazadora consagrada a Ártemis, y por lo tanto, rechazaba cualquier tipo de amor masculino, y, por supuesto, no quería casarse.De tal modo, el enamorado Apolo persiguió locamente a Dafne. Mientras, ella huía de él. Pero, poco a poco, Apolo fue reduciendo distancias y cuando iba a darle alcance, y se encontraba ya cansada, Dafne pidió ayuda a su padre, el río Peneo de Tesalia. Apenas había concluido la súplica, cuando todos los miembros se le entorpecen: sus entrañas se cubren de una tierna corteza, los cabellos se convierten en hojas, los brazos en ramas, los pies, que eran antes tan ligeros, se transforman en retorcidas raíces, ocupa finalmente el rostro la altura y sólo queda en ella la belleza. Este nuevo árbol es, no obstante, el objeto del amor de Apolo, y puesta su mano derecha en el tronco, advierte que aún palpita el corazón de su amada dentro de la nueva corteza, y abrazando las ramas como miembros de su cariño, besa aquél árbol que parece rechazar sus besos.El laurel es la planta dedicada a Apolo, en recuerdo de su amor por Dafne. Una corona de laurel era el premio que recibían los ganadores del concurso Pítico.

dimarts, 22 de gener del 2008



HERMES
El dios de los viajes, heraldo de los dioses para los hombres
Atributos:
Se le representa calzado con sandalias aladas, cubriéndose la cabeza con un sombrero de ala ancha (el pétaso) y empuñando el caduceo (una vara de oro), símbolo de sus funciones de heraldo de los dioses. Puede aparecer con la lira la flauta (o siringa), instrumentos que inventó.
Culto:
Pasaba por ser el dios del comercio y también del robo. Guiaba a los viajeros por los caminos. Velaba por los pastores. Acompañaba a los Infiernos a las almas de los difuntos, función que le valía el nombre de Psicopompo, el Acompañante de las almas. Se le consagra el cuarto día del mes, día e su nacimiento.
Leyenda:
Hijo de
Zeus y Maya, la más pequeña de las Pléyades. Nació en una caverna del monte Cileno, al sur de Arcadia. Maya lo había concebido por obra de Zeus en plena noche, mientras dormían los dioses y los hombres.En Pilos, Hermes sacrificó dos de los animales robados, dividiéndolos en doce partes, una para cada uno de los doce dioses. Luego, después de ocultar el resto del rebaño, huyó a su gruta del Cileno. Al llegar a ella encontró en la entrada una tortuga; que vació y tesó sobre la cavidad de la concha unas cuerdas fabricadas con los intestinos de los bueyes que había sacrificado; de este modo quedó construída la primera lira.Mientras tanto, Apolo andaba buscando sus bestias por todas partes. Por fin llegó a Pilos, donde Bato le descubrió el escondite. Se decía también que Apolo había averiguado toda la historia gracias a su arte adivinatorio, observando el vuelo de las aves. Se trasladó entonces al monte Cileno y se quejó a Maya de los robos de Hermes su hijo; pero Maya le mostró al niño, envuelto en sus pañales, y le preguntó cómo era posible que profiriese contra él una acusación semejante. Entonces Apolo requirió la presencia de Zeus, el cual ordenó al niño que restituyese los animales robados, pese a sus protestas de inocencia. Sin embArgo, Apolo había visto la lira en la gruta del Cileno, y oído los sonidos que Hermes obtenía de ella. Seducido, cambió su ganado por el instrumento.Algo más tarde, Hermes, guardando los rebaños que había adquirido como se ha dicho, inventó la flauta (la siringa o flauta de Pan). Apolo quiso comprarle este nuevo instrumento musical y le ofreció en pago el cayado de oro que utilizaba para guardar las manadas de Admeto. Hermes le pidió, además, lecciones de arte adivinatoria. Apolo aceptó el trato, y de aquí que la vara de oro (el caduceo) figure entre los atributos e Hermes. Éste aprendió también a adivinar el porvenir sirviéndose de pequeños guijarros. Zeus, satisfecho de la habilidad y actividad de su último retoño, lo nombró su heraldo, consagrándolo particularmente a su servicio personal y al de los dioses infernales, Hades y Perséfone.

Joana

Dédalo e Ícaro



Parentesco: es hijo del arquitecto Dédalo, constructor del laberinto de Creta y de una esclava.

Mito: Dédalo fue un prestigioso arquitecto, inventor y escultor, muy respetado en Atenas. Él fue condenado a muerte por el tribunal por el asesinato de su sobrino. Dédalo consigue escapar y embarca en un navío que va a Creta. Allí es recibido con todos los honores por el rey Minos, quien lo convierte en su servidor.
Un día, Pasifae, la esposa de Minos, pide al escultor que le fabrique una figura de vaca que se semejara a la real para cometer un delito con el toro blanco de Creta, Esto lleva a cabo el nacimiento de una criatura dotada mitad de cuerpo humano y mitad de toro: El Minotauro. Para tratar de esconderlo, Minos ordena a Dédalo que construya un laberinto de donde jamás pudiera salir esta bestia
Teseo, el hijo del rey de Atenas, parte rumbo a Creta con el fin de asesinar al Minotauro, lo cual logra con la ayuda de Ariadna, la hija de Minos. Teseo se introduce en el laberinto llevando un ovillo de lana que desenrolla desde el principio para poder regresar cuando lo fuese necesario.
Con la esclava Naucrates, Dédalo tuvo un hijo llamado ícaro, el cual fue encerrado junto con su padre dentro del laberinto por los engaños cometidos al rey.
Con el pasar del tiempo a Dédalo se le ocurre la idea de construirse alas para escapar del laberinto, y comienza a juntar plumas, las cuales va uniendo con trozos de lino abandonados en el laberinto y cera extraída de los panales de abejas. Así conforma los dos pares de alas que los elevan hacia el cielo de Grecia.
Al volar, los cuerpos no encuentran el equilibrio exacto, por lo cual Dédalo recomienda a Ícaro que vuele siempre a una altura media: ni demasiado bajo, para no hundirse en el mar, ni demasiado alto, para que el sol no quemara las frágiles plumas.
Dédalo llevando la delantera no observa que Icaro, deslumbrado por la belleza del firmamento y con la música de los pájaros, comienza a cobrar altura poco a poco. Hasta que llega el momento en que los rayos del sol comienzan a ablandar la cera que sujetaba las plumas y éstas empiezan a desprenderse poco a poco hasta que Ícaro cae al mar. Cuando Dédalo mira atrás, no encuentra a su hijo, pero ve dos alas que flotan en el mar y sobrevuela el lugar infinitas veces tratando de encontrar el cadáver de su hijo.
Dédalo llega a Sicilia y se pone bajo el servicio del rey Cócalo para quien construye un embalse, fortifica la ciudad.